Tu zona de confort… y un caldito caliente
Tu abuela siempre te ha dicho que el mundo fuera de tu zona de confort está lleno de incertidumbres y de problemas. Y es que tu abuela te quiere mucho y, de buena fe, te advierte de los peligros de allí afuera. Y te convence para que te quedes en casa, en tu zona de confort, con una tacita de caldo caliente, reconfortante y placentero…
Pero la realidad es que, ese caldo tan sabroso que estás sorbiendo día a día, está hecho de miedos y de temores heredados que están impidiendo tu desarrollo como la persona madura y autosuficiente que deberías atreverte a ser. ¿Te das cuenta? Existe un horizonte más allá de los temores heredados. Ese caldo de miedo irracional te provoca tensión emocional negativa y te impide avanzar hacia tus metas.
Tu zona de confort, un estado mental
Lo que está ocurriendo es que tu zona de confort se ha convertido en un estado mental en el que percibes que no hay riesgo ni peligro alguno. De manera que no te mueves, no actúas, no tocas nada ni cambias nada. De acuerdo, estás muerto en vida. Porque, en definitiva, no estás permitiendo tu crecimiento personal. Te están dominando tus miedos. Y si quieres una vida plena, con objetivos cumplidos, tendrás que vencer tus miedos. Tendrás que ser valiente. La vida te lo exige.
Debes creer más en ti, creer que tienes el derecho a ser tu mismo. Tu puedes, si quieres, acompañarte a ti mismo y ayudarte a movilizar tu propia tensión creativa, proporcionarte inspiración y dejarte llevar por la pasión del aprendizaje que va a ser la llave para salir de tu zona de confort.
¿Y si sales de tu zona de confort y entras en tu… zona mágica?
El conocimiento y la madurez de pensamiento te van a liberar del miedo que te provoca salir de ese lugar familiar y conocido, repetitivo y, en realidad, asfixiante. Así podrás penetrar en una nueva dimensión más fresca y estimulante. Totalmente desconocida… Esa es tu zona mágica. Aquella zona donde te sientes inspirado y capaz de reunir tus fuerzas creativas para construir tu vida, la vida que realmente deseas, más allá del espejismo de la facilidad acomodaticia.
Hay que ser valiente para salir de la zona de confort y para encontrar la fuerza necesaria para la transformación. Hay que ser audaz para avanzar hacia el crecimiento. Lo más difícil es dar el primer paso y cambiar el rumbo en dirección a la propia autonomía.
Significa entrar en una zona que tu mismo debes diseñar y donde debes establecer las bases para que se manifieste. Sí, sufrirás decepciones y deberás aprender a convivir con ello.
Si tienes la fe suficiente en tu propio futuro, aprenderás de esos errores para seguir avanzando paso a paso. Si permites que sea tu pasión la que gobierne tus pasos, tu creatividad te sacará de tu crisálida protectora. Como hace la oruga que, como bien sabes, su fin significa la Vida de una nueva mariposa…preparada para volar.